Muchos de nosotros pensamos que en una situación de entrevista, el entrevistador tiene la autoridad y el poder, y el entrevistado es el más débil. Sin embargo, la verdad del asunto es que la situación es bastante diferente. El entrevistador controla la duración de la entrevista, las preguntas formuladas y su propio comportamiento, pero el entrevistador no tiene control sobre el resultado de la entrevista. El entrevistador no tiene un conocimiento previo profundo sobre el solicitante de empleo, su desempeño anterior, sus características sobresalientes, si trabaja en equipo, etc.
En el espacio de unos pocos minutos, el entrevistador debe evaluar a un candidato y esta es una misión complicada que cumplir. Por lo tanto, la noción de que el entrevistador tiene toda la información, es consciente de todo y controla la entrevista es engañosa y falsa. El entrevistador solo tiene control sobre:
- las preguntas formuladas
- la duración de la entrevista
- su propio comportamiento (incluyendo su actitud hacia el entrevistado).
El entrevistado determinada el resultado de la entrevista
Es el entrevistado, más que el entrevistador, el que determina el resultado de una entrevista al elegir comportarse de cierta manera, por la naturaleza y el contenido de sus respuestas.
Como entrevistado puedes determinar y establecer:
- El contenido de tus respuestas, lo que eliges enfatizar y lo que no
- El tono de tu voz y el ritmo al que hablas
- Tu progresión: ¿serás optimista, pesimista o carecerás de confianza?
- Tu apariencia
- Tu actitud hacia el entrevistador
- La medida en que eres asertivo
- Tu capacidad para concentrarse en sus habilidades positivas y efectivas en el trabajo
¡Recuerda!
Tienes el poder de influir en el resultado de la entrevista. Tu comportamiento y tus respuestas a las preguntas formuladas determinan si obtienes ese trabajo o no. Aprovecha la oportunidad que se te brinda y preséntate de manera concisa y profesional. Evita la confrontación con el entrevistador por cuestiones que están fuera de tu control, como el tipo de preguntas formuladas, la actitud de los entrevistadores hacia ti, ya sea que el entrevistador sea amable o no. Estos elementos están en manos de los entrevistadores y es incorrecto que intentes influir en ellos.
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