Cuidado con el entrevistador amigable

Entrevista de trabajo

En algunos casos, conocerás a un entrevistador amigable, tranquilo y acogedor. Esto puede ser un alivio para algunos y puede llevarlos a actuar con entusiasmo y, a veces, de una manera descuidada y tal vez no medida. 

Cuidado con lo que dices en una entrevista

Algunos pueden estar abiertos voluntariamente a un grado en el cual divulgan información que no es necesariamente requerida. El solicitante de empleo puede pensar: "Dado que el entrevistador es tan amigable, no tengo nada de qué preocuparme, supongo que realmente le agrado y puedo decirles cualquier cosa".

La divulgación de información innecesaria puede ser perjudicial e incluso puede conducir a la descalificación.

Por ejemplo: un entrevistador informal y amigable entrevista a un solicitante de un puesto financiero y administrativo. Le pregunta al solicitante si en su posición actual de administración y finanzas, la mayor parte del trabajo es financiero o administrativo. Dado que el solicitante se siente cómodo, comparte con el entrevistador el hecho de que la mayor parte del trabajo que realiza es en efecto administrativo por naturaleza (a pesar de que tiene un aspecto financiero). Este tipo de respuesta, en efecto, ha comprometido sus posibilidades de éxito en la entrevista ya que la impresión que causó es que no tiene el tipo de experiencia que están buscando.

De hecho, el solicitante puede tener todas las habilidades y experiencia requeridas, pero como decidió divulgar toda la información de manera no calculada, ha causado una impresión desequilibrada.

En la mayoría de los casos, un entrevistador amistoso e informal es un experimentado que "seduce" al solicitante de empleo para que actúe libremente. Algunos solicitantes pueden sentirse demasiado cómodos en tales situaciones y pueden revelar sus debilidades en una medida que pueda conducir a su descalificación.

¡Recuerda!

Una entrevista es una oportunidad para que exhibas tus calificaciones y habilidades en lugar de una oportunidad para entablar una conversación amistosa y ganar simpatía. Así como no hay ninguna razón para que te sientas ofendido o a la defensiva cuando te encuentres con un entrevistador hostil, no debes celebrar y "bajar la guardia" cuando te encuentres con un entrevistador amistoso e informal. En ambos casos, debes ser conciso, educado y responder adecuadamente a las preguntas formuladas, ni más ni menos.

¡Importante! Te recomendamos que te centre en dar una presentación concisa de tus habilidades profesionales. No hay necesidad de revelar información privada innecesaria o debilidades para corresponder al entrevistador por su buen comportamiento.

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